Flash y Java en la Web: su lento pero inexorable final

La muerte de Flash y Java en la Web

Flash y Java en la Web: su lento pero inexorable final

Hola a todos y saludos desde el área Web de la Escola Espai. En Espai somos unos entusiastas de las nuevas tecnologías Web, y siempre es un placer compartir con vosotros nuevas tendencias o tecnologías que van surgiendo. Sin embargo, hoy vamos a hablar de dos viejas glorias que se resisten a morir: Flash y Java en la Web. Dos tecnologías que en su momento dominaron la Web y cuya principal virtud hoy día es dar muchos males de cabeza.

El final de Flash y Java en la Web, el final de una era

Hubo un momento, no hace tanto, en el que la falta de madurez de la Web suponía problemas importantes para lograr ofrecer ciertos servicios a través de la Web o para poder mostrar contenido multimedia de la forma adecuada.

Java y Flash permitían resolver muchos de estos problemas.

En ambos casos la filosofía era realmente la misma, en lugar de servirle una página web «normal» al usuario, se le envía otro tipo de archivo que es interpretado por un programa que el usuario tiene que instalar previamente en su navegador; esos programas son los famosos plug-ins del navegador. El navegador deja de tener realmente el protagonismo limitándose a un papel de mero intermediario, y es el plug-in el que hace el trabajo sucio.

Esta aproximación en su momento ya era claramente un «pan para hoy y hambre para mañana», y el tiempo está demostrándolo. La principal virtud de los plug-ins (poder hacer casi cualquier cosa a través del navegador Web) es a su vez su mayor defecto.

Flash Games

Flash nos dio los vídeos y juegos en la web.

El problema de los plug-ins maliciosos

Los plug-ins no dejan de ser programas y por lo tanto tienen mucha mayor capacidad de hacer daño que un simple archivo HTML. Desde que la Web es Web, además de virus, troyanos y demás fauna, han existido programas cuya máxima prioridad es abusar de la ingenuidad y la confianza del usuario. Una vía usada frecuentemente por los programadores de dichas criaturas son los plug-ins.

Muchos usuarios, de forma inconsciente o no, iban instalando plug-ins en sus navegadores de forma «alegre» convirtiendo su navegador en un sistema de espionaje y motorización de sus actividades con fines comerciales; por lo general mostrar publicidad y redirigir el usuario a webs concretas. Esta inconsciencia de los usuarios obligo a los creadores de los navegadores a establecer mayores medidas de seguridad, y a incrementar los mensajes de advertencia al usuario antes de instalar ningún plug-in.

Un gran poder conlleva una gran responsabilidad

Los plug-ins son poderosos porque tienen acceso a recursos del sistema que una pagina Web normal no tiene. Cuando un programador hace una aplicación Web con un lenguaje como PHP, la aplicación se ejecuta en el servidor Web y hace uso de los recursos de dicho servidor para servir al visitante un archivo HTML normal y corriente. Cuando ejecutamos un plug-in, la aplicación Web se ejecuta en nuestro ordenador, son los recursos de nuestro ordenador los que hacen posible que el plug-in realice su trabajo. Así, por ejemplo, si dicho plug-in consume mucha CPU nuestro ordenador ira más lento, hasta el punto que puede dejarlo medio bloqueado.

La web es un entorno hostil, por eso es tan importante hacer uso de un navegador moderno y convenientemente actualizado. El problema es que por bueno, fiable y seguro que pueda ser un navegador, deja de serlo si un plug-in que tiene instalado no lo es.

El lento desarrollo de HTML/CSS

Al existir una alternativa gracias a los plug-ins, HTML/CSS no han evolucionado todo lo rápido que hubiera sido deseable. Flash, en concreto, permitía a los diseñadores hacer cosas que en HTML eran imposibles. También permite algo tan fundamental como poder incrustar vídeos. Incluso hoy día, que es perfectamente posible prescindir de Flash para incrustar vídeos, son muchísimas las páginas que aún lo usan. No hay que olvidar que, ni mas ni menos, Youtube anuncio que «abandonaba» Flash hace tan solo 1 año. De hecho, el gigante del buscador anunciaba recientemente que también abandonará su uso en AdWords.

Java y la Administración

La vida sería más fácil sin el plug-in de Java…

Coladores en términos de seguridad

Tanto Flash como Java son considerados como auténticos coladores en términos de seguridad. Las continuas e insoportables actualizaciones del plug-in de Flash, son una demostración del «parcheo» continuo de agujeros de seguridad de dicho producto. Los fabricantes de los navegadores hace tiempo que son conscientes de los problemas tanto de seguridad como de rendimiento de estos plug-ins, y viene presionando para forzar que se abandone su uso. Un ejemplo lo vimos el año pasado cuando Chrome bloqueo por defecto el soporte de Java y otros plug-ins, mientras que Firefox llevaba ya un par de años haciéndolo.

El presente y futuro de los plug-ins del navegador

Oracle ya ha marcado el mes pasado el plug-in de Java como producto obsoleto, dando a entender que pronto dejarán de darle soporte. Y Adobe ya va dando a entender que Flash está muerto.

Plantearse un futuro inmediato sin plug-ins no es probablemente ni creíble ni deseable. Lo que si parece claro es que su uso continuará restringiéndose hasta convertirse en algo menos masificado y más puntual: hace pocos años todo el mundo tenia el Flash y el Java instalados, hoy día ya no hay ningún plug-in de uso tan masivo. Pero por desarrollado que este HTML5, siempre habrá necesidad de hacer cosas con el navegador que requerirán del uso de plug-ins.

Los navegadores han sustituido gran parte de las necesidades que cubrían los plug-ins con otros programas más limitados, las «extensiones» del navegador. Si bien también suponen riesgos de seguridad, estabilidad y rendimiento; son piezas de software que dependen más del navegador y cuya capacidad de hacer daño es más limitada.

Cerramos este artículo con unos consejos finales derivados de todo lo explicado y una aclaración;

  • Usar siempre navegadores actualizados (si, eso incluye dejar de usar Internet Explorer).
  • Instalar solo aquellos complementos/extensiones/plug-ins que realmente necesitáis para vuestro navegador (de cuando en cuando es conveniente revisar que tenemos instalado y hacer limpieza).
  • Tener desactivados Flash y Java (probablemente no los echareis en falta y así os vais acostumbrando para cuando no existan).
  • Con «el final de Java en la Web», me refiero únicamente al final de su plug-in.

Así que ya sabéis, aún estáis a tiempo de echaros una última partida al Doom con el plug-in de Flash.

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